Lisardo García está al frente de una de las pocas ganaderías de cabras que perviven en la zona central y occidental
19.02.2014 | 01:41
Lisardo García, en los montes de Vigidel, que lindan con el puerto de San Lorenzo (Somiedo). S. Arias
Vigidel (Teverga), Sara ARIAS Los rebaños de cabras están casi desaparecidos en la zona central y occidental de la región. Pero en Vigidel (Teverga), Lisardo García continúa con esta labor ancestral con su rebaño de 300 cabras y 200 cabritos que acaban de nacer. Es una época de mucho trabajo para el ganadero, que la enfrenta con dosis de pasión por lo que hace, pero también con la incertidumbre del futuro sobre su cabeza. Según García, las pérdidas por daños de animales salvajes se multiplican: «El año pasado, de 200 cabritos sólo pude vender 50», afirma.
Comienza la jornada a las ocho de la mañana. Con su quad sube hasta la cabaña y la finca donde se guardan los cabritos durante los primeros meses. Allí separa a las cabras de las crías, aunque a algunas las tiene que poner a mamar porque «las cabras no quieren mucho a las crías». Después, separa a las adultas según su estado de gestación. Las que están a punto de parir se quedan y el resto sube al monte con los mastines. Todo en medio de un inmenso silencio, sólo roto por los balidos de los animales y el repicar de los cencerros.
Con ellas sube hasta las cumbres que lindan con Somiedo. «Se quedan todo el día, si hace malo por la tarde ya bajan, pero si hace buen tiempo tengo que subir a por ellas, más que trabajo físico es que te vuelven loco», comenta. De nuevo en la cabaña, García hace todo tipo de trabajos. Ahora está empleándose a fondo con el tejado de la cuadra, levantado por el viento en diciembre. «Siempre hay cosas que hacer; a veces, cuando me doy cuenta, son las diez de la noche».
García asegura que siempre fue «muy ecológico» en el manejo, pero desde hace diez años su ganadería lo es oficialmente. Esto le conlleva elevar el coste de producción porque los piensos y los forrajes son muy caros, dice. Pero la preocupación del ganadero es sobrevivir a los lobos y los osos. «Debe de haber un equilibrio porque ahora esta zona está plagada y me desespera porque no tengo forma de proteger a las cabras», señala.
El ganadero sostiene que se encuentra en tierra de nadie porque, por un lado, la producción se merma con las pérdidas y, por otro, no tiene forma de justificarlas porque «se los comen como a un conejo, no dejan nada». Por ello, considera que los ganaderos de ganado menor necesitan el apoyo de la administración para continuar en una profesión en vías de desaparición.
La asociación piloñesa de ganaderos y agricultores critica la demora de los cazadores en el pago de indemnizaciones por daños a los afectados
La sección séptima de la Audiencia Provincial ha condenado a la Asociación de Cazadores El Portal a abonar 10.137,82 euros a la propietaria de una finca ubicada en la parroquia maliaya de Coro por los daños provocados por especies cinegéticas en su cultivo. La sentencia, fechada el pasado día 12, estima la demanda presentada por María Dolores Huerta y revoca un auto anterior dictado el pasado mes de julio por la jueza de Primera Instancia de Villaviciosa.
Los hechos se remontan a la primavera de 2011, cuando la afectada descubrió que el corzo había provocado numerosos daños en su pomarada. Tras comprobar los destrozos y ver que el estado de varios árboles era irreversible, alertó de lo sucedido al presidente de El Portal, en aquel momento el colectivo responsable de gestionar el coto de Villaviciosa. Sin embargo, ante el paso de varios meses y la falta de soluciones, decidió comunicar lo sucedido a la asociación de ganaderos y agricultores de Piloña, que en el mes de septiembre acudió a la finca con un perito, que valoró los daños en 10.137,82 euros. «Vimos que eran unos destrozos importantes y que la afectada debía ser indemnizada, así que lo pusimos en manos de nuestros abogados para que El Portal no siguiera dándole largas», explicó Luis Cueto, presidente del colectivo.
Tras un acto de conciliación en el que la asociación cinegética no ofreció ninguna compensación monetaria a Huerta, en febrero de 2012 se celebró un juicio en el Juzgado de Primera Instancia de Villaviciosa. Pero el resultado no fue el esperado por la afectada. «La sentencia salió a finales de julio y era un despropósito, condenaba a El Portal a pagar 191 euros y a María Dolores a asumir las costas procesales», apuntó Cueto. «Nos pareció tan desproporcionado y tan sin sentido, que decidimos recurrir», añadió.
Tres años
Así las cosas, Huerta presentó un recurso de apelación en la Audiencia Provincial que ahora le ha dado la razón y ha condenado a los cazadores a abonar los 10.137,82 euros peritados, a los que habrá que sumar los intereses correspondientes que se han ido generando. «Lamentamos la situación que se produce en Villaviciosa con la gestión de los cotos y el proceder del presidente de El Portal», señaló Cueto, quien animó a los propietarios de terrenos a ponerse en contacto con el colectivo de ganaderos y agricultores en caso de pasar una situación similar. «Hubo que esperar tres años, pero al final nos dieron la razón», apuntó.
Asimismo, Cueto teme que los retrasos se debieran al proceso abierto por el Principado para adjudicar los cotos y criticó que los cazadores no propusieran una solución a la afectada. «Cuanto más se dilatase el proceso de pagar los daños, menos les afectaría a la hora de concurrir a la licitación», comentó. El de María Dolores Huerta no es el primer juicio ganado por el colectivo contra El Portal, ya que en febrero de 2012, el Juzgado de Primera Instancia de Villaviciosa condenó a los cazadores a pagar 1.019,85 euros, más intereses, por los daños provocados en una finca particular de Breceña.
Tres cabras muertas y ocho desaparecidas. Ése es el triste balance de un nuevo ataque del lobo en el concejo de Onís. En esta ocasión el cánido se cebó con un rebaño, propiedad del joven Marcos Remis, que se encontraba pastando en el Puerto Bajo de Camplengu Dubia.
La consejera de Agroganadería piensa que el proyecto del Ministerio tampoco garantiza un mayor desarrollo económico de los espacios
El Principado de Asturias, a través de su consejera de Agroganadería y Recursos Autóctonos, María Jesús Álvarez, dejó patente ayer su oposición al proyecto de ley de parques nacionales presentado por el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente. Los motivos en los que sustenta este rechazo el Gobierno asturiano son dos: que considera que la futura norma rebaja el nivel de protección ambiental y que además este proyecto de ley no garantiza un mayor desarrollo económico de aquellos lugares donde se encuentran asentados estos espacios protegidos.
Álvarez realizó ayer estas manifestaciones en la localidad leonesa de Oseja de Sajambre, a donde había acudido para participar en la Comisión de Gestión del Parque Nacional de los Picos de Europa. Allí también indicó que, a su parecer, el Ministerio ha abierto «un debate amplio y complejo» sin necesidad. Y es que en opinión de la consejera de Agroganadería, si el Estado pretendía dar respuesta a las dificultades de gestión que afrontan determinados espacios protegidos, debería haber modificado la ley «en esos espacios concretos y atender a esas necesidades puntuales».
Pese a las bases marcadas en la futura normativa que regirá los principales espacios protegidos del país, en el seno del Gobierno asturiano hay confianza en que el proyecto de ley se reconduzca durante el trámite parlamentario para que alcance el mayor equilibrio «entre la conservación y el desarrollo económico». «Hemos dado nuestra opinión al Ministerio en tiempo y forma y ahora se abrirá el trámite parlamentario donde esperamos que pueda ser reconducido (el proyecto de ley)», valoró la consejera asturiana. De hecho Álvarez recalcó que el Consejo de Estado se pronunció en términos bastante críticos con el texto y exigió que se tuviese en cuenta la sentencia del Tribunal Constitucional que reconoce la competencia de las comunidades autónomas sobre estos territorios.
La visión de María Jesús Álvarez sobre el proyecto de ley de parques nacionales es diametralmente opuesta a la que existe en Castilla y León. El consejero de Fomento y Medio Ambiente de la comunidad vecina, Antonio Silván, valoró de forma muy positiva la futura norma, la cual entiende que contribuirá a «mantener el patrimonio natural y a garantizar la actividad económica».
Por su parte Basilio Rada, director del organismo autónomo de Parques Nacionales del Ministerio de Medio Ambiente, explicó que con la nueva ley lo que se busca es «reconducir un poco la legislación básica de los parques nacionales, que era algo necesario». Según indicó, «nos encontrábamos con dos escenarios, unos parques nacionales gestionados por las autonomías y una red de parques del Estado, y pensamos que esta situación sin conexión entre ambas no podía continuar». «La ley aporta la coordinación estatal que hacía falta, de manera que las comunidades autónomas desempeñan su papel y el Estado también. Con esta ley se va a conseguir una mejor conservación de los parques nacionales», garantizó Basilio Rada, quien aseguró que «no hay ninguna actividad nueva que permita la ley que no se esté practicando ya en los parques nacionales». Por último afirmó que la norma elaborada por el Ministerio «acerca el Estado a los parques nacionales para prestar ayuda económica y de coordinación».
Traspaso de poderes
Silván asumió ayer la presidencia de la Comisión de Gestión del Parque Nacional que Castilla y León ocupará durante este año. El consejero aseguró que las tres comunidades autónomas que comparten los Picos de Europa afrontan este 2014 «con más fuerza, ganas e ilusión y con el brío» que requiere la gestión de un paraje natural como es el de los Picos. «El objetivo es continuar con la conservación del patrimonio natural y contribuir al desarrollo del parque, porque hoy en día no se entiende un parque nacional sin personas y sin actividad económica, eso sí, respetuosa con el medio ambiente», manifestó Silván.
En este sentido la consejera de Agroganadería y Recursos Autóctonos del Principado de Asturias indicó que «más haya de las diferencias que pudiera haber (entre comunidades autónomas) estamos obligados a gestionar los Picos de Europa de una forma conjunta porque no puede hacerse como si fueran tres trocitos de territorio porque el parque es un todo». Para María Jesús Álvarez es obligado tener una visión de conjunto en lo que afecta a este espacio protegido ya que, aunque las competencias estén repartidas entre las tres comunidades autónomas que comparten los Picos, «el reto es elevar la vista y superar visiones localistas que no nos ayudan a avanzar». «Al final el objetivo es el mismo: preservar un espacio de gran valor y posibilitar que los hombres y las mujeres que viven dentro de él no encuentren obstáculos a su desarrollo social y económico», señaló la consejera.
Recuperación del río Duje
Ayer también se conocieron algunas de las obras previstas dentro del espacio protegido durante este 2014. En territorio Asturiano se confirmó que se va a recuperar medioambientalmente el río Duje, en la localidad cabraliega de Tielve, y en el que existe un problema de vertidos. La inversión prevista, que correrá a cargo del Consorcio del Parque Nacional de los Picos de Europa, asciende a 180.000 euros, de los que el Principado aportará 100.000. El proyecto contempla recuperar este río, afluente del Cares, uno de los cauces salmoneros más importantes de España. Además también están previstas distintas obras de desbroces y mantenimiento de pistas en la vertiente asturiana de los Picos de Europa.
Por su parte en Castilla y León también comenzarán este año las obras de construcción de los centros de visitantes de Oseja de Sajambre y de Posada de Valdeón. En el primero de los casos el presupuesto asciende a 2,5 millones de euros y los trabajos se licitarán, salvo sorpresa, el próximo mes de marzo. Por su parte el centro de Posada de Valdeón será ejecutado por la empresa pública Tragsa. Los trabajos comenzarán «próximamente», según aseguró Antonio Silván, y la inversión prevista para este equipamiento ronda los siete millones de euros. Para Silván estos dos centros supondrán «una nueva puerta de entrada» al Parque Nacional de los Picos de Europa.
El proyecto Life para su protección impulsado por la Unión Europea, que ha desembolsado 226.000 euros -el 75% de la financiación necesaria- en esta iniciativa
19.02.14 – 00:58 –
M. REGO | VITORIA.
La única pareja de águilas perdiceras que reside en Euskadi es vecina de Álava y cuenta con un plan propio para asegurar su supervivencia pues se trata de una especie en peligro de extinción. El proyecto Life para su protección impulsado por la Unión Europea, que ha desembolsado 226.000 euros -el 75% de la financiación necesaria- en esta iniciativa, acaba de ponerse en marcha con el objetivo de reintroducir ejemplares del animal en el territorio y realizarles un seguimiento vía satélite a través de un sistema GPS.
La Diputación aprobó ayer mismo la suscripción de un convenio con la sociedad pública Gestión Ambiental de Navarra (GANA) para coordinar el programa bautizado como Life+Bonelli -al ave se le conoce también como Águila Bonelli- que se desarrollará hasta 2017. En ese tiempo se mejorará el hábitat del animal y se aumentará la población de especies de presa, como conejos o palomas, para su alimentación.
El consejo de diputados acordó también ayer una inversión de 889.128 euros para garantizar la sanidad de la cabaña ganadera de Álava, tarea que se encargará a la firma Abere. Esta nueva cooperativa, nacida de la fusión de Sergal y Abeltzain, pretende «optimizar recursos, evitar duplicidades y ofrecer un mejor servicio», destaca el Gobierno foral.
En este último fin de semana nuestro hospital ha vuelto a recibir animales heridos por disparo.
El primero de ellos, un ratonero (Buteo buteo), fue encontrado en un canal de riego en la zona de Aranjuez. La lluvia amenazaba con inundar el canal por lo su rescate fue hecho con urgencia. A su llegada se le realizó una exploración completa que mostró que el animal estaba desnutrido y tenía una fractura abierta en el ala. La fractura tenía algunos días de manera que el hueso había comenzaba a necrosarse. El animal era irrecuperable y nada más se podía hacer por él. En el examen oftalmológico se encontró que, además, se encontraba luxado el cristalino del ojo izquierdo, lo cual se correspondía con una imagen radiográfica que mostraba un perdigón alojado en la cuenca de este ojo.
No quedaba muy claro si el disparo había sido el causante de la fractura del ala, sin embargo, es evidente que sí había causado la ceguera del ojo, comprometiendo por tanto gravemente la vida del animal.
Un par de días más tarde, un nuevo aviso llegaba a GREFA. En esta ocasión se trataba de un milano real (Milvus milvus) procedente de Collado Mediano. El animal había sido encontrado en un pardo siendo molestado por unas cornejas.
El animal se encontraba sumamente debilitado, muy deshidratado y caquéctico. La exploración mostró una fractura abierta de cúbito con exposición de hueso que presentaba un avanzado aspecto de necrosis.
El animal había perdido mucha sangre y fue asistido con mucha urgencia para intentar estabilizarle. En este caso el aspecto de la herida, nos indujo a pensar que podía tratarse de una electrocución. La necrosis avanzada del ala y el estado del animal, hizo finalmente imposible su recuperación a pesar de los esfuerzos invertidos en el paciente.
Por segunda vez en poco tiempo, el realizar la radiografía, nos encontramos con la desagradable sorpresa de que el animal presentaba varios perdigones en su cuerpo.
Nuevamente tenemos que denunciar la actividad de desaprensivos, que no pueden llamarse cazadores, sino tan sólo pistoleros sin escrúpulos, que disparan sobre nuestra fauna protegida, incluso sobre especies como el Milano Real, que se encuentra catalogado como especie vulnerable dentro del Catálogo Nacional de Especies Amenazadas. Dos nuevas rapaces que han perdido sus alas, dos aves destinadas a volar, que no volverán a hacerlo por culpa de nuevo de la necedad humana.
Los caballos gallegos de monte ejercen un papel fundamental para asegurar la conservación del lobo y mantener el equilibrio de estos depredadores con el hombre y el ganado, según un estudio del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) que ha destacado su importante valor de índole socioconómica.
La investigación ha destacado que esta raza autóctona contribuye a la conservación de los brezales, y permite la presencia de lobos incluso en zonas con actividad ganadera donde escasean las presas silvestres, al tiempo que reducen el riesgo de incendio forestal. Por ello, el estudio aboga por mantener el régimen de manejo tradicional.
«Los caballos se han mantenido gracias a que apenas demandan inversión de recursos por parte de sus propietarios, al interés de preservar los recursos genéticos de esta raza autóctona y a tradiciones culturales asociadas al manejo de estos animales, que llevan un estilo de vida más próximo al de una especie silvestre que al de una doméstica», ha explicado el investigador de la Estación Biológica de Doñana del CSIC Alejandro Rodríguez.
Además, de acuerdo con este trabajo, que publica la revista Conservation Letters, los caballos facilitan la conservación del lobo porque suponen su principal alimento allí donde están presentes, por lo que se reduce el nivel de daño a otro tipo de ganado.
«El servicio más importante que prestan los caballos de monte es de índole socioeconómica. Los caballos actúan como atenuadores de las pérdidas de los ganaderos y parecen ser un factor esencial que permite la coexistencia del lobo con una intensa actividad agropecuaria», ha añadido el investigador.
Sin embargo, el estudio advierte de que la cría tradicional de esta especie tiene un futuro «incierto» por la escasa rentabilidad económica, por las recientes regulaciones europeas que imponen costes adicionales a la ganadería equina y por la desaparición de las necesidades que provocaron esta selección y mantenimiento de esta raza milenaria.
Los investigadores consideran también que la convivencia entre lobos y humanos en Galicia podría verse «amenazada» por el declive del caballo gallego de monte.
«Las recientes disposiciones que han aliviado la carencia de ganado muerto sobre la conservación de aves y mamíferos carroñeros podrían no aplicarse al lobo en Galicia», ha alertado el investigador.
Finalmente, Rodríguez ha manifestado que la reducción de la cantidad de caballos presentes en los montes gallegos puede conducir, no sólo a la pérdida de los importantes servicios que los caballos prestan, sino también a despertar un conflicto ambiental ahora adormecido en torno a la depredación de ganado por el lobo.
Técnicos de la Fundación para la Conservación del Quebrantahuesos (FCQ) han podido constatar en el marco del proyecto Life+Red Quebrantahuesos la pasada semana, la creación de la primera unidad territorial de la especie en los Picos de Europa, tras 80 años desde su desaparición. Se trata de una pareja formada por la hembra ‘Deva’ – cedida por el Gobierno de Aragón y liberada en 2010 en el marco del Programa de recuperación del quebrantahuesos en Picos de Europa – y un ejemplar adulto dispersante procedente de los Pirineos, que se ha instalado en una zona de gran calidad de hábitat para la especie, en la vertiente asturiana del Parque Nacional de los Picos de Europa. La pareja, que ha sido objeto de un continuado seguimiento por parte del personal de la FCQ, mostró los primeros indicios de aproximación durante el pasado mes de noviembre.
El lugar escogido por los ejemplares para su asentamiento, se caracteriza por la abundancia de ungulados domésticos y salvajes, que garantizan la provisión de recursos tróficos, y la presencia de grandes cortados, que brindan un hábitat excepcionalmente favorable para el quebrantahuesos. De hecho, este asentamiento se encuentra a menos de 3 km de distancia del último nido conocido para la especie que data del año 1956, y cercano a los señuelos colocados en el año 2003 con la colaboración del grupo de rescate de rescate e intervención de montaña de la Guardia Civil (GREIM) . El territorio escogido presenta una alta probabilidad de ocupación según el ‘Estudio de calidad de hábitat potencial para la especie’, realizado en el año 2003 en el marco del citado Programa de recuperación.
Deva, la hembra reintroducida, está actualmente en su cuarto año de vida y aunque es una edad fisiológicamente temprana para iniciar la reproducción, ya demuestra actitudes territoriales defendiendo la zona ante buitres y otras rapaces. Por su parte, el ejemplar proveniente de Pirineos es un adulto dispersivo que permanece en la zona desde principios del verano pasado, recorriendo los tres macizos (se han realizado avistamientos en las tres provincias que comparten los Picos de Europa) y que se ha sedimentado en la zona que ocupa Deva atraído por la posibilidad de reproducirse.
Los técnicos de la FCQ han podido observar de primera mano significativos comportamientos pre-reproductores en la nueva unidad territorial: comportamiento nupcial con varias copulas, el aporte de material de construcción del nido -lana- hasta en tres emplazamientos diferentes (cuevas) e interacciones intraespecíficas. Estos comportamientos son los mismos que los observados en parejas silvestres en Pirineos, donde en estas fechas se encuentran en plena actividad reproductora, y suponen el primer indicio desde hace sesenta años en el Parque Nacional Picos de Europa de la aceptación por una hembra del acercamiento de otro ejemplar con estos fines.El quebrantahuesos es un buitre osteófago -se alimenta principalmente de huesos de ungulados silvestres y domésticos- y territorial, históricamente presente en la mayoría de las regiones montañosas de Europa, Asia y África. Durante el último siglo, estas poblaciones del Paleártico occidental han sufrido un drástico proceso de regresión por causas antrópicas, que ha conducido a su declive y extinción en la mayoría de las áreas donde estaba presente. No es el único ejemplo. De todas ellas las especies animales y vegetales descritas en el planeta, unos 30 millones, la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) cifra en 1.000 las que se encuentran en peligro de extinción y en 17.000 las amenazadas. Para el 2020 la diversidad de especies se puede haber reducido en un 33%. España alberga la mayor biodiversidad de Europa: unas 85.000 especies de fauna y flora. Pero según el Catálogo Nacional de Especies Amenazadas (CNEA), hay 610 taxones amenazados en nuestro país, y se han extinguido al menos 17 especies animales y 24 especies vegetales en los últimos cien años como es el caso de la reciente extinción del bucardo (Capra pyrenaica pyrenaica) en 6 de enero del año 2000 en el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido.
Las especies declaradas en peligro de extinción se han duplicado en los últimos 25 años, y entre las que muestran un status más delicado se encuentran el lince ibérico, el águila imperial, el buitre negro, el oso pardo, el urogallo, el visón europeo o el quebrantahuesos.
Debido de su amenazada situación, durante los últimos años el quebrantahuesos ha sido objeto de planes de conservación en diferentes países europeos. En nuestro país, los diversos trabajos de investigación y seguimiento por parte de las administraciones públicas, en colaboración con ONG, realizados en los últimos 15 años han tenido como resultado una notable recuperación de la población de quebrantahuesos en España, hasta alcanzar las 129 unidades reproductoras que actualmente habitan en la vertiente española del Pirineo (de un total de 166 presentes el toda la cordillera pirenaica incluyendo la vertiente francesa).
A la vista de estos datos, el asentamiento de esta pareja abre nuevas esperanzas de recuperación para la especie en el estado español. El Programa de recuperación del quebrantahuesos en los Picos de Europa tiene como objetivo el asentamiento estable de la especie en el área, posibilitando así el mantenimiento de una meta población que favorezca un flujo e intercambio continuado de ejemplares, a través del corredor ibérico-cantábrico, con la población pirenaica. Ampliando así su área de distribución y contribuyendo a disminuir el riesgo de extinción de la especie, que mantiene concentrada en la cordillera pirenaica la única población silvestre viable de Europa.
La FCQ es una organización no gubernamental (ONG) creada en 1995 y declarada de utilidad pública, que se dedica a promover y desarrollar proyectos de conservación, gestión,
investigación, desarrollo rural y sensibilización en los hábitats de montaña en los que vive el quebrantahuesos. En esta línea, y durante todo el periodo 2013-2018, la FCQ -con la cofinanciación de la Unión Europea, el Consorcio Interautonómico ‘Parque Nacional Picos de Europa’, el Ministerio de Agricultura, Alimentación de y Medio Ambiente, y el Gobierno de Aragón-, gestiona el proyecto LIFE+ » Conservación del quebrantahuesos como recurso para el mantenimiento de los servicios ecosistémicos”, también conocido por su acrónimo “Red Quebrantahuesos», que incluye distintas actuaciones dirigidas a la efectiva recuperación de la especie en Picos de Europa a partir de la cesión de ejemplares recuperados en situación de riesgo en el Pirineo aragonés.
Los objetivos del proyecto, que se fundamenta en la cooperación interregional, pasan por el desarrollo de buenas prácticas destinadas a recuperar la especie y a mejorar el escenario ecológico y social en el que tendrá lugar esta recuperación mediante el impulso de la conservación de la biodiversidad como herramienta de desarrollo rural. Así, se potenciarán diversas actuaciones para el desarrollo del ecoturismo, o el refuerzo de la Red Natura 2000.
Es una raza ganadera autóctona en peligro de extinción
Explotaciones ganaderas como esta ayudan a conservar los espacios
La actividad tradicional rentable es compatible con la conservación
Rebaño de cabras de Guadarrama, una especie autóctona que ayuda a conservar el monte.feagas.com
EFE/Raúl Casado 17.02.2014
Algunas organizaciones profesionales y conservacionistas llevan años esforzándose por recuperar razas ganaderas autóctonas que están asegurando la calidad de muchos hábitats, por razones históricas, culturales y también argumentaciones estrictamente medioambientales.
Razas como la vaca blanca cacereña, la oveja merina negra o la cabra de Guadarrama, catalogada esta última como «en peligro de extinción» pero que ha vuelto a «colonizar» muchos espacios del centro peninsular.
En la localidad madrileña de Villa del Prado se localiza una de las cabañas más numerosas de esta raza caprina. Concretamente sobre los encinares del río Alberche y de su afluente, el río Cofio, un valioso espacio de la Red Natura 2000 que destaca por su buen estado de conservación, a pesar de la cercanía a Madrid (apenas 80 kilómetros) y por albergar algunas especies de flora y fauna más emblemáticas de la península ibérica.
Economía tradicional y conservación
En Villa del Prado, unas 500 cabras de Guadarrama, una especie autóctona que solo ha sobrevivido en zonas altas del centro, pasta a diario y garantiza con su presencia la buena conservación del lugar.
El propietario del rebaño, el ganadero Juan Antonio Martín del Pozo, ha subrayado a EFE que estas actividades tradicionales son «fundamentales» para el medio ambiente porque contribuyen a que el monte esté más limpio y mejor cuidado, además de ser un ejemplo de actividad económica tradicional rentable «perfectamente compatible» con la conservación.
Las cabras pastan y contribuyen a que el monte esté más limpio y mejor cuidado
Martín del Pozo preside la Asociación de Criadores de Cabra de Guadarrama, una organización que desde hace 20 años trabaja para garantizar la conservación de la raza y procurar su expansión, y que está promoviendo que muchos ganaderos modernicen y adapten sus explotaciones a las cada vez mas exigentes condiciones sanitarias.
Se trata además de animales muy rústicos que están contribuyendo a rentabilizar zonas de difícil acceso que no resultan aprovechables para otro tipo de ganado.
La cabra de Guadarrama, en peligro de extinción
La veterinaria Paloma Díez de Tejada ha observado que se trata de un animal en peligro de extinción y catalogado dentro de las razas de «protección especial» por el Ministerio de Agricultura y Medio Ambiente, y ha explicado que tras el descenso que ha experimentado el censo durante los últimos años, en la actualidad se ha estabilizado en torno a los 8.000 ejemplares.
Díez de Tejada ha celebrado que gente joven se haya incorporado a la explotación de este tipo de ganado, lo que a su juicio es un signo «muy esperanzador» tras la tendencia de los últimos años de vender rebaños enteros o de apostar por otras razas.
Un espacio de la Red Natura 2000
La actividad de esta cabaña se sucede sobre uno de los lugares mejor conservados de la Red Natura 2000 en España, los Encinares del río Alberche y el río Cofio, catalogados como Lugar de Importancia Comunitaria (LIC) y como Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA), las dos figuras previstas en la Red Natura 2000.
En este espacio viven especies como el águila imperial o el buitre leonado. Se trata de una extensa mancha verde que se extiende por las comunidades de Madrid, Castilla-La Mancha y Castilla y León.
Así, se constituye como un espacio ejemplar de la Red Natura 2000 para comprender cómo la supervivencia a largo plazo de especies y hábitats puede depender de las actividades más tradicionales.
Ese es el principal objetivo de la Red Natura 2000 -un instrumento legislativo de conservación de la Unión Europea-, que incluye un conjunto de casi 26.000 espacios que se quieren proteger para garantizar a largo plazo.
Castilla y León asumirá mañana la presidencia de la Comisión de Gestión del Parque Nacional de Picos de Europa, que es rotatoria entre las tres comunidades que se reparten el territorio de este espacio natural y que el pasado año desempeñó Cantabria.
El consejero de Fomento y Medio Ambiente de Castilla y León, Antonio Silván, presidirá a partir de las 11:00 horas en el Ayuntamiento de Oseja de Sajambre (León) una reunión de este órgano de dirección.
Asistirán además las consejeras de Agroganadería y Recursos Autóctonos de Asturias, María Jesús Álvarez; y de Ganadería, Pesca y Desarrollo Rural de Cantabria, Blanca Azucena Martínez; y el director del Organismo Autónomo de Parques Nacionales, Basilio Rada.
Además del traspaso de la presidencia a Castilla y León, está previsto que, entre otros asuntos, se aborde la elaboración del Plan de Ordenación de los Recursos Naturales (PORN) y la presencia del lobo en el Parque Nacional.