Nicolás González, jefe de Espacios Naturales y Especies Protegidas de la Delegación Territorial de la Junta en Ávila.
Entrevista a Nicolás González, jefe de Espacios Naturales y Especies Protegidas de la Delegación Territorial.
Mayte Rodríguez – domingo, 23 de febrero de 2014
Afirma que los ataques sobre el ganado aumentan por el incremento de la población de lobos en Ávila, ¿en qué medida ha crecido?
Muy pronto se publicará el censo oficial, que está ultimándose y cuyos datos van a ser fundamentales para poder tomar medidas de gestión, pero es verdad que desde el último que se hizo en el año 2001 la población de lobo ha crecido, entonces había uno o dos grupos, ahora podemos estar en seis o siete. Hay que tener en cuenta que los lobos no se contabilizan en parejas ni en unidades, sino en grupos o manadas, que pueden tener entre dos y diez ejemplares cada uno. Este aumento es lógico en una zona donde no había lobos, de ahí que sea área de avance de la población del norte de la comunidad, donde posiblemente viven los mismos grupos porque allí no hay posibilidad de avance, así que van extendiéndose por los extremos hasta Segovia, Ávila e incluso Madrid.
¿Hasta qué punto es posible la convivencia entre la ganadería y el lobo?
La Consejería de Medio Ambiente cree que es posible, pero siempre adoptándose medidas de prevención de los ataques por parte de los ganaderos, con indemnizaciones adecuadas para quienes los sufren y con pagos ágiles. Pero hay que tratar al lobo como un elemento más del medio natural en el que está el ganado extensivo: como un rayo, como una piedra o como una enfermedad que le entra a las reses. El lobo no es un extraterrestre, forma parte del medio por mucho que haya ganaderos que hasta ahora antes nunca habían convivido con el lobo, por eso hay que desdramatizar al lobo.
Fuente noticia: http://www.diariodeavila.es/noticia/Z8BEA91DC-B3D8-8C75-FA6CF844EB974435/20140223/a%C3%B1o/2001/habia/dos/manadas/lobos/hoy/son/6/7