Productores alistanos critican «la verbena de Fitur» y piden a los defensores del depredador «que se hagan ganaderos»
29.01.2014 | 00:29
CHANY SEBASTIÁN La localidad de Ceadea se ha convertido en la primera del año en sufrir una lobada en tierras alistanas. El ganadero Francisco Martín, que posee un ganado de la raza «castellana» ha perdido 7 ovejas en el ataque, coincidiendo con las fechas en las que el colectivo de empresarios «Interior Legendario», la asociación «Lobo Marley» y el presidente de la Diputación de Zamora Fernando Martínez Maíllo presentaban al lobo ibérico como seña de identidad de la provincia de Zamora.
Martín no es la primera vez que sufre un ataque de cánidos. En los pueblos colindantes como Moveros, Arcillera y Vivinera no hay ovejas y los ataques de la manada de la zona rayana casi siempre le tocan a él. Se tiene constancia de otra manada en los montes de Cerezal, siendo continuos los ataques a los dos ganados de Videmala de Alba; y otra en la «Sierra Cantadores», que suele atacar por el área de Carbajales de Alba, Manzanal del Barco, Muga, Losacio y Marquiz y Vegalatrave tanto a ovejas como a ejemplares de vacuno.
Ganaderos de la comarca piden respeto a «los soñadores» para los que nos ganamos el sustento con el trabajo de sol a sol, con sacrificio, sin domingos ni fiestas, sin pedir nada a cambio, solo que nos respeten», a la vez que mostraban su malestar contra «la patética verbena de Fitur». Irónicamente mencionan a Martínez Maíllo, Antonio Campesino y Luis Miguel Domínguez y les proponen que «si tanto les gusta el lobo que se compren una ganado de ovejas y se metan pastores. Así podrán saber lo que se siente cuando viene un lobo y te mata la mitad del ganado». Defienden los ganaderos que «el lobo, los pastores y las ovejas siempre hemos convivido, pero parece que algunos se están riendo de nosotros. Las vías pecuarias, cañadas, cordeles y veredas están la mayoría ocupadas por la maleza, carreteras, prados y casas: de eso no se preocupan».