El lobo ya actúa junto al mar

Por la izquierda, Fernández y Gómez, ayer, observando La Braña desde la carretera de Llamigu, en Llanes. Ramón Díaz

Nueva (Llanes), R. D.

El lobo continúa ampliando su territorio hacia el Norte. Tanto así que un becerro resultó muerto por el ataque del lobo en el paraje conocido como La Braña, situado a escasos centenares de metros de la localidad de Nueva de Llanes, a apenas dos kilómetros en línea recta del mar. Es la primera vez que se tiene conocimiento de daños de esta especie al ganado en las inmediaciones de Nueva.

El ganadero afectado por el ataque, Guillermo Gómez, ha podido constatar la muerte de una res, pero le han desaparecido otras cuatro más, que, según sospecha, pudieron tener el mismo fin. La Consejería de Agroganadería ya ha tiene conocimiento del ataque y una funcionaria ha reconocido que ha sido protagonizado por el lobo.

El ataque debió producirse en la noche del pasado sábado, pues el ganadero no halló a las reses al día siguiente. Pudo encontrar el cadáver el lunes, con las patas traseras totalmente devoradas. De las otras cuatro desaparecidas -una de ellas ya en diciembre- Guillermo Gómez, residente en Posada, aunque natural del valle de Caldueñu, no ha encontrado ni rastro.

Pero no ha sido el único ataque al ganado registrado en esa zona. También el sábado, en un paraje conocido como Colláu la Tabla, entre Llamigu y Rinsena, el ganadero José Ramón Fernández González halló a una de sus cabras muerta y otra más ha desaparecido, según su testimonio, también por el ataque del lobo. En su caso, los guardas de la Consejería aún no han acudido a determinar el origen del daño, algo que harán previsiblemente el próximo lunes.

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