
El informe realizado por la Consejería de Agroganadería desaconseja que la especie sea considerada cinegética, como solicitan estos consistorios
127 escritos de alegaciones ha recibido la propuesta de revisión del Plan del Lobo durante su primer periodo de exposición pública -luego se amplió unas semanas más-, según figura en el informe realizados por los servicios de la Consejería de Agroganadería. Buena parte de ellos pertenecen a colectivos de ámbito conservacionista, aunque también los hay de agrupaciones cinegéticas, de organizaciones agrarias, de ayuntamientos o de particulares, entre otros, algunos con domicilios tan alejados de Asturias como Alcorcón, Cartagena, Ronda o Almansa. Entre todas estas alegaciones se encuentran las presentadas por los alcaldes de Amieva, Cabrales, Cangas de Onís o Peñamellera Alta, en representación de estos consistorios del Oriente de Asturias. Desde la Consejería de Agroganadería se han agrupado los escritos de estos consistorios, junto al presentado por el Foro de Ciudadanos y los grupos municipales de Foro Asturias en los distintos ayuntamientos, para darles una respuesta unitaria al apreciar similitudes importantes en sus alegatos.
El informe indica que se han presentado «11 escritos bajo idéntico formato» que se articulan en torno a 17 alegaciones con dos ideas principales: solicitar la nulidad de la revisión del Plan del Lobo y reclamar que se declare al cánido especie cinegética.
Los servicios de la Consejería de Agroganadería van respondiendo de uno en uno a los principales alegatos de estos ayuntamientos del Oriente. El informe recuerda el marco normativo existente en Asturias y se recalca que «el lobo goza, en nuestra región, de una regulación específica que permite que no sean de aplicación las prohibiciones genéricas de dar muerte, molestar, dañar o inquietar a los animales silvestres». También se añade que «las particulares características del territorio asturiano, de las explotaciones agrarias y de la administración de la actividad cinegética en la región desaconsejan la declaración del lobo como especie cinegética».
Así mismo se afirma en el informe que la revisión del Plan del Lobo «está basada en los conocimientos técnicos y científicos más fundados que se tienen sobre la especie en nuestra región». Y se afirma que, aunque la normativa europea da la opción de adoptar medidas de gestión para controlar a esta especie, no obliga a ello.
El informe también da respuesta a las alegaciones que cuestionan la participación de la Guardería de la Consejería en las tareas de control del lobo al entender que ésta no es su función. Desde la Administración se sostiene que sí están habilitados para ello -auxiliados por los guardas de los cotos regionales- y que así lo recoge la normativa vigente. Aún así se indica que se permite la participación voluntaria de cazadores en las labores de control de una forma muy limitada y determinada, pero nunca como una explotación cinegética de la especie.
Fuente noticia:http://m.elcomercio.es