Una desafortunada campaña publicitaria identifica al ‘Canis lupus’ como el principal opositor de agricultores y ganaderos
Vamos a dejarlo en que ha sido un desliz, una audacia publicitaria en la que el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente se ha limitado a poner su anagrama y que nadie en el departamento de Miguel Arias Cañete se ha molestado en analizar el anuncio. Pero el patinazo sigue siendo injustificable, en mi opinión: identificar al lobo como el principal enemigo de agricultores y ganaderos en una campaña oficial de seguros agrarios no es el mejor favor que se le puede hacer desde el Gobierno al ‘Canis lupus’, en plena polémica en Asturias y Castilla y León por los intentos de incluirlo en el catálogo de especies cazables (ya lo es al norte del Duero, ahora solo faltaría que también se le pudiera disparar en Picos de Europa). El anuncio se publicó ayer en varios periódicos, entre ellos ‘La Verdad’.
Quizá desde el punto de vista publicitario el anuncio sea impecable, y resulta que ganaderos y agricultores se movilizan en masa para asegurar sus rebaños y cultivos. OK, objetivo cumplido entonces, pero habrá sido a costa de reforzar el tópico casposo y falaz de que el lobo es una alimaña dañina para el mundo rural. Los enemigos del campo, creo, hay que buscarlos en los despachos donde se fijan precios abusivos con los productores y se diseñan políticas agrarias que se olvidan, precisamente, de quienes tienen que vivir con los cada vez más escasos márgenes de cosechas y explotaciones ganaderas.