| Jueves, 23 de Enero de 2014 14:13 |
José Manuel Soto, izquierda, y Alberto Castro, derecha, durante la reunión de esta mañana.Así lo ha indicado esta mañana el delegado de la Junta, Alberto Castro, tras una reunión con representantes de las Organizaciones Profesionales Agrarias, donde ha detallado que «en 2013 murieron 209 cabezas de ganado al sur del Duero y 174 al norte por ataques de lobo, mientras que en el 2010 fueron 879 al sur y 454 al norte».
Castro ha afirmado que esta es «una buena noticia, aunque eso de nada le sirve al ganadero que haya sufrido un ataque, pero sí indica que la dirección es la correcta». Además, la provincia cumplió casi de manera total con los cupos de los lobos que se pueden abatir, «ya que al norte se abatieron 30 de los 32 permitidos y, al sur, la Junta abatió a dos lobos».
Otra de las soluciones parciales planteadas por los ganaderos es la de la creación de una especie de muladares en los que dejar a los animales muertos «para que sirva de comida a los lobos y buitres y reducir así también los ataques; ya hay varias peticiones pero hay que estudiarlas porque los requisitos ambientales son complicados, porque no se pueden abandonar a los animales, tiene que estar todo controlado», ha detallado Castro.
Por su parte, el responsable de Medio Ambiente de COAG, José Manuel Soto, ha incidido en que «la población del lobo hay que controlarla más, nunca se llegan a cumplir completamente los cupos cinegéticos, en Zamora está bien este año pero en otras provincias no se llega ni al 50 por ciento».
«Los ganaderos son los que estamos manteniendo al lobo, pero lo que no podemos aceptar es que nos pongan de rodillas. Hay gente que defiende al lobo y hace negocio con ello, nos parece muy bien que venga gente a verlo y cuanta más mejor, pero lo que hagan el negocio no pueden poner las normas, porque somos nosotros los que estamos conviviendo con el lobo», ha argumentado Soto.