La Junta de Castilla y León ha redactado un proyecto de decreto de revisión extraordinaria del Plan de Conservación y Gestión del Lobo, en el que se contempla que al sur del Duero la compensación de los daños a la ganadería que origine esta especie se regirá por la legislación en materia de responsabilidad patrimonial de las administraciones públicas. El documento, que se encuentra ahora en el periodo de información pública, recoge también que la Administración regional favorecerá la suscripción de seguros voluntarios que cubran los daños derivados de los ataques de lobos.
Así lo ha afirmado Nicolás González, jefe de la sección de Espacios Naturales y Especies Protegidas de la Delegación Territorial de la Junta en Ávila, quien ha añadido que «con esta revisión se pretende aclarar el plan anterior a la vista de una sentencia del Tribunal Superior que anuló algunos aspectos del anterior Plan de Conservación» (sentencia que venía a dar la razón a la demanda presentada por el sindicato agrario UPA), entre ellos, el de los pagos por responsabilidad patrimonial. Y es que, anteriormente, la Junta venía abonando los daños producidos por el lobo en la ganadería extensiva al sur del Duero por la vía de seguros franquiciados, sistema por el cual la Junta corría al cargo de toda la franquicia para que el ganadero, que debería haber suscrito un seguro previamente que le cubriera los daños ocasionados por ataques de lobos, pudiera percibir el cien por cien de la cuantía de las pérdidas. También se contemplaba la compensación vía patrimonial aunque no se utilizaba esta vía prácticamente en ningún caso. Sin embargo, ahora este tipo de indemnización toma más fuerza tras la sentencia y han sido 20 las solicitudes presentadas durante 2013, tal y como ha informado Nicolás González. Sin embargo, son diversos los requisitos que han de cumplirse para poder tener acceso a este tipo de indemnización, que contempla que estos daños son una responsabilidad de la Administración al estar protegida al sur del Duero esta especie. «Esto es lo que ahora se está estudiando», afirma el responsable de Espacios Naturales y Especies Protegidas en Ávila. Algunos de estos requisitos consisten en que el daño sea evaluable monetariamente, que haya un responsable individual, que no tenga la obligación de soportar ese daño… «Se trata de un tema complejo jurídicamente», añade González. Por lo que se refiere a lo que algunos ganaderos solicitan en el sentido de crear reservas para los lobos al sur del Duero, Nicolás González ha desestimado esta posibilidad «porque el lobo, si tiene virtualidad de existencia es de vivir en estado libre y no tiene ningún sentido confinarse en ningún recinto», aunque sí reconoce que esta opción es complicada en los lugares en los que existe ganadería extensiva.
Durante 2013 no se ha abatido ningún ejemplar «aunque había permiso para abatir un lobo en cada una de las comarcas afectadas por los ataques de cánidos».
El borrador del decreto que se estudia en estos momentos plantea la creación de una Mesa del lobo donde van a estar representados todos los actores sociales que tengan algo que ver con la conservación, la gestión o la ganadería t se creará un comité científico de asesoramiento». La previsión es que en los próximos meses esté aprobado el Decreto definitivo.
