El águila perdicera está en situación «crítica» en Catalunya.

 

El águila perdicera está en situación

El águila perdicera podría desaparecer de Catalunya, según un estudio de la Universitat de Barcelona Equipo de Biología de la Conservación de la UB

Barcelona. (Redacción).- La situación actual de la población de águila perdicera (Aquila fasciata) en el territorio catalán es “crítica” y su supervivencia probablemente dependerá de la llegada a Catalunya de individuos de esta especie procedentes de otras regiones, según estudio publicado en la revista Ecological Monographs, de la Sociedad Americana de Ecología, por un equipo de investigadores de la Universitat de Barcelona, que ha tenido el apoyo de la Fundación Miquel Torres y la Diputació de Barcelona.

El águila perdicera (àliga perdiguera o cuabarrada, en catalán) es una de las aves rapaces más representativas —y también más amenazadas— de la región mediterránea. Los individuos adultos de esta especie rapaz diurna alcanzan entre 1,5 y 1,8 metros de envergadura (alas abiertas) y tienen el dorso marrón claro y partes inferiores blanco-amarillentas con trazos oscuros.

“Esta especie convive bien con la agricultura y la ganadería tradicionales gestionadas de manera sostenible, que generan espacios abiertos y facilitan la presencia de sus presas”, explica Joan Real, profesor del departamento de Biología Animal y jefe del Equipo de Biología de la Conservación, responsable del seguimiento del águila perdicera desde hace tres décadas.

El abandono de las actividades agrícolas y ganaderas tradicionales, el cambio de los hábitats y la desaparición de las presas más comunes (conejos, palomas, perdices y lagartos) dificultan la supervivencia de esta especie. Además, la situación se hace crítica en las zonas con presión humana excesiva, prácticas de agricultura intensiva, urbanización y tendidos eléctricos no protegidos, indican los expertos.

El estudio científico presentado ahora revisa los principales indicadores demográficos de las poblaciones de águila perdicera en Europa occidental de 1980 a 2009, y alerta de que en el sector norte de la península ibérica se encuentran los núcleos poblacionales con más riesgo de desaparecer. Entre otros datos, la investigación indica que la situación de esta especie es critica en Catalunya, donde se registra una mortalidad adulta del 17%, mientras que en Andalucía el valor es del 5%.

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