El Principado continuará aplicando los controles establecidos en el plan de gestión del lobo para regular la población existente en el concejo de Salas y no aumentará el número de batidas controladas. Es lo que trasladó ayer la directora general de Recursos Naturales, Fina Álvarez, al alcalde salense, Sergio Hidalgo, durante una reunión en la que el regidor detalló la «situación dramática» que viven muchos ganaderos, que en los últimos meses han registrado importantes pérdidas a consecuencia de ataques de los cánidos.
Ante la preocupación suscitada, el Ayuntamiento solicitó medidas «para paliar la expansión de la especie», pero, según explicó el alcalde, la cifra de lobos que maneja el Principado, aunque «elevadas», no muestran «un incremento significativo respecto al año pasado».
