La directora de Recursos Naturales reclama a ganaderos y ecologistas que revisen sus posiciones para «lograr que coexistan» los cánidos y el ganado
04.12.2013 | 02:25
Potes (Cantabria), Ramón DÍAZ La directora general de Recursos Naturales lanzó ayer en Potes (Cantabria) un llamamiento a los ganaderos y a los ecologistas para que cedan en sus posiciones y así lograr «la coexistencia del lobo y la ganadería». La dirigente del Principado, que participó en una reunión del patronato del parque nacional de los Picos de Europa, fue tajante: «Todo el mundo debe ceder; ni es posible cero daños, ni tampoco cero lobos». ¿La solución? Según indicó, conseguir un nivel de «daños mínimos» o «tolerables», que sea asumible por los ganaderos, y un nivel de población de lobos que garantice «su supervivencia».
Fina Álvarez fue, junto con la representante ecologista, Laura López Varona, y el codirector asturiano del Parque, Rodrigo Suárez Robledano, la persona más pitada por un grupo de unos cuarenta ganaderos asturianos que protagonizó una concentración pacífica frente al Centro de Estudios Lebaniegos de Potes, donde se celebró la reunión. Sonaron lloqueros y se desplegaron pancartas, entre ellas varias contrarias al lobo y una que calificaba el parque nacional de «basura».
Tanto Fina Álvarez como Rodrigo Suárez Robledano (este en compañía del director conservador, Agustín Santori) y Laura López Varona mantuvieron conversaciones por separado con el portavoz de los ganaderos, Benedicto Rojo. El tono de los tres encuentros fue amistoso.
López Varona entregó al representante de los ganaderos documentación que muestra cómo fue el propio Parque el que suspendió los controles del lobo, el 2 de octubre de 2012, tras no haber contestado una petición ecologista sobre su suspensión cautelar. López Varona subrayó, asimismo, que los rectores del Parque ocultaron aquella resolución, lo que impidió que los ganaderos, las asociaciones del sector, los ayuntamientos o cualquier otra persona la recurriera o se personara en el procedimiento, lo que llevó a los jueces a ratificar la suspensión de los controles. Claro que los dirigentes del Parque negaron a los ganaderos cualquier responsabilidad en la suspensión de los controles y señalaron como causantes de esta situación a los ecologistas, por haber recurrido dos recientes sentencias judiciales.
Durante la reunión del patronato se reanudó esta discusión, con López Varona como principal protagonista, al asegurar que varias actuaciones de funcionarios del Parque hace unos años, como la muerte a golpes de varios cachorros de lobo, hicieron «que los ecologistas perdiéramos la confianza en ellos».
La representante ecologista lanzó varias propuestas, como la conveniencia de permitir de nuevo que los ganaderos dejen los cadáveres de los animales muertos en el campo. Se podría lograr así, además de evitar gastos y molestias al ganadero, que los lobos vuelvan alimentarse de carroña, lo que disminuiría los daños al ganado. «La carroña estuvo siempre a disposición del lobo, hasta que surgió el mal de las «vacas locas», pero ahora su retirada ya no es obligatoria». La representante ecologistas propuso, asimismo, que se dejen como carroña los jabalíes y ciervos abatidos en controles poblacionales en Cantabria.
Quebrantahuesos
El patronato informó favorablemente el proyecto LIFE+ para la conservación del quebrantahuesos, presentado por la fundación que lleva el nombre del ave. El patronato aprobó elevar a cuatro el número de ejemplares que se soltarán en los Picos de Europa en los próximos meses, así como ampliar la zona que la Fundación para la Conservación del Quebrantahuesos ocupa en El Cantón de Texéu para la cría de pollos en cautividad.